La felicidad es estar liado. Uno de mis grandes trucos para ser feliz es estar viendo qué puedes hacer por los demás. Si tú te dedicas a hablar, si tú te dedicas a intentar que las personas te quieran, arrancar muchos “te quiero”, y a compartirlo y decirlo también, vas a ser feliz siempre.
Cipri Quintas
Cuéntanos tu historia
Yo soy un chico de San Sebastián de los Reyes, criado en Alcobendas, que desde muy joven he sido muy soñador pero con una ventaja, que yo no dejo volar mi imaginación, hago que vuele mi cuerpo. Porque cada vez que yo tenía un sueño, soñaba o planificaba algo, me levantaba y lo escribía y luego lo llevaba a cabo o lo intentaba llevar a cabo. Son millones de veces que he intentado hacer cosas y millones de veces que no lo he conseguido. Pero todas esas millones de veces me han ayudado a ser mejor, a crecer, a aprender y a equivocarme menos. Con 21 años me convertí en un empresario de éxito. Y a raíz de ahí, no me he dado cuenta, he ido creciendo hasta un total de 30 locales que he abierto, y por el camino, como no dejo volar mi imaginación, he tenido agencias de publicidad, empresas de reformas, constructora.
A día de hoy, ¿en qué repartes tu tiempo?
Hace unos 10 años monté una empresa de marketing digital; Valor de Ley. Luego, otro hito de mi vida fue que hace 4 años, Planeta me dijo que debería escribir un libro de networking. El libro se ha convertido en un bestseller, vamos a hacer la décima edición ya. No he parado de hacer entrevistas, radio, prensa, y estoy desbordado. Luego, he ido evolucionado en el mundo de la hostelería y ahora tengo un local llamado Silk and Soya, y estoy de asesor en algunas compañías. Y luego, me dedico a temas solidarios.
Te defines como «SEO de personas» ¿Qué significa?
Yo soy un posicionador de personas. He construido como hábito a ver a quién puedo presentar. Yo me paso el día haciendo que pasen cosas.
Hablamos de tu libro. Es muy divertido de leer. Estaba pensando en lo que pones en el libro, sobre el abrazo. ¿Cuál es el truco para dar un abrazo y saber cuándo darlo?
Cuando uno se da un abrazo con otro, la energía y la conexión es brutal. Pero tenemos miedo a abrazar. Yo abrazo mucho y eso me ha hecho mejor persona. Cuando das un abrazo intercambias energía y me ha hecho conocer a la persona antes, y saber sus puntos débiles.
¿Crees que estamos casi programados para centrarnos siempre en lo negativo o hablar mal de la gente?
Cuando eres niño no estás programado para eso, pero al final tu mamá de dice: “Ten cuidado algo querrá”, o en el colegio. Viene alguien con la camisa blanca, impoluta, súper ilusionado, y tú enseguida buscas la mancha. A mí me acusan mucho de pensar bien.
Tienes una iniciativa muy chula que es El club de la tertulia, es como una tertulia de televisión pero hechas en positivo
El Silk es un local donde pasan cosas. Es un sitio donde te puedes relacionar con un montón de gente. Intento generar muchas actividades aquí porque, al final, es el gran comedor, el gran salón de mi casa.
¿Qué otras iniciativas haces aquí?
Nunca hemos hecho promociones. Las promociones son esta fiesta solidaria. El Silk se ha llenado de gente solidaria que venía una vez al mes a un evento solidario, donde todo lo que se recaudaba era para la fundación.
Hay un capítulo en el libro que es: “Volver a ser niños” que yo lo leo, lo entiendo y me gustaría aplicarlo pero me resulta muy difícil
Es que no hay truco. El truco está en el trato. Llegar al trato contigo mismo de dejarte fluir. Ser niño es lo más fácil del mundo. Es dejarte caer, es sonreir, es mostrar lo que sientes, reirte por el hecho de reirte.
Tienes un montón de gente en tu agenda. ¿Más o menos cuánta?
Lo bueno que tengo de mi agenda es que tengo nombre, apellido, teléfono y tengo el día de su cumpleaños, notas, siempre en positivo, etiquetas en positivo, porque así luego cojo el teléfono y pongo esgrima y me salen todos mis amigos que juegan al esgrima y los puedo presentar. Debo de tener unos 8.000 nombres.
¿Y cómo haces para mantener vivas tantas relaciones?
Les hago el mayor regalo del mundo que es venir a mis fiestas solidarias una vez al mes por un WhatsApp o por mis redes sociales, les felicito el cumpleaños, felicito la navidad, pregunto cuando han estado malos, como están. O me acuerdo de alguien que tiene una empresa de coches y le presento con otro de la zona que tiene empresa de reparación.
Te gusta presentar personas para que sucedan cosas, no por sentirte protagonista
La vida es un gran teatro. Tú puedes elegir ser un espectador más. A mí me gusta ser un guionista. ¿Qué es lo que hago yo? Es posicionarlos, el SEO, posicionarlos, hacer que se conozcan.
¿Nos puedes recomendar algún libro que haya marcado tu vida?
El pequeño libro de los grande valores de Meirav Kampeas-Riess que habla de la historia de su abuela que fue una superviviente del campo de concentración. El libro Superpoderes del éxito de Mago More. Las Siete claves del éxito espiritual de Deepak Chopra, Sincro Destino de Deepak Chopra, Emprender desde la confianza de José María Gasalla.
Últimamente ¿a quién estás siguiendo más que te aporte a nivel espiritual o alguien que sigas en las redes sociales?
A mí me gusta mucho Anxo Pérez, tiene un libro muy bueno; Los 88 peldaños del éxito. Sigo mucho a José Mota que es mi amigo. Sigo muchísimo al padre Ángel, a Sandra Ibarra, a Irene Villa, el Langui, a Lary León que es una chica que nació sin una pierna y sin dos brazos, sigo mucho a Álvaro que es un chico que nació con parálisis cerebral, a Gustavo que es hijo de Isabel Gemio.
Imagínate que vuelves a tener 17 años, con la experiencia de la vida actual, ¿qué volverías a hacer con los ojos cerrados y qué evitarías a toda costa?
Volvería a ser empresario, me encanta ser dueño de mi vida, aunque muchas veces no la escoges. Hubiera aprendido al los 17 años que los fuertes, los malos, con los que me junté mucho, no eran los más fuertes, y el que más macarra era, solo era más macarra. Si tuviera 17 años me preocuparía menos y me ocuparía más.
¿Cuál es tu meta en la vida?
Hacer este mundo mejor